
Varios desarrolladores de juegos han pedido a sus jugadores que protesten La nueva estructura de precios recientemente anunciada por Unity, bajo la cual a los desarrolladores que alcancen un cierto umbral de ingresos o instalaciones de juegos se les cobrará cada vez que alguien instale su juego. Algunos equipos también han anunciado planes para deshacerse de Unity y trasladar sus proyectos a otros motores de juego, como Godot o Unreal.